En el tejido social y económico de un país, la salud es un hilo vital que conecta a sus ciudadanos. En el caso de Colombia, como en cualquier nación, el sistema de salud desempeña un papel crucial en la calidad de vida de sus habitantes.
En medio de un panorama en constante evolución, la necesidad de reformas en el acceso y la calidad de los servicios de salud se convierte en un tema central. Estar informado sobre los cambios propuestos se vuelve esencial, ya que estos no solo impactan la manera en que accedemos a la atención médica, sino que también delinean el futuro bienestar de la sociedad colombiana.
En este artículo, explicaremos el contexto y la relevancia de la reforma en el sistema de salud, entendiendo su implicación directa en la salud y el bienestar de todos los ciudadanos. ¡Acompáñanos en este viaje informativo que toca la fibra misma de nuestra existencia, incluso muchos usuarios de Codere Colombia se lo preguntan!
Objetivos Principales de la Reforma
La propuesta de reforma en el sistema de salud en Colombia tiene como objetivo mejorar la eficiencia, equidad y accesibilidad en la prestación de servicios médicos. Se destaca la creación de una red de centros de atención primaria con enfoque preventivo para acercar los servicios de salud a comunidades, priorizando áreas rurales y marginadas. Además, se plantea eliminar las afiliaciones a las Entidades Prestadoras de Salud (EPS) y establecer una entidad estatal, la Administradora de Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud (ADRES), para simplificar la administración de pagos y eliminar barreras administrativas.
La reforma también propone transformar las EPS, limitando su papel y eliminando los giros estatales, así como poner fin a los recobros por servicios médicos no incluidos en el Plan Obligatorio de Salud (POS). Se busca mejorar las condiciones laborales del personal de salud, incluyendo salarios competitivos, prestaciones y desarrollo profesional.
Cambios en el Financiamiento de la Salud
La propuesta de reforma en el sistema de salud colombiano busca cambios significativos en el financiamiento para agilizar el flujo de recursos y garantizar la sostenibilidad financiera. Se plantea la transición hacia las Gestoras de Salud y Vida, sujetas al giro directo de recursos por parte de la Adres, con el objetivo de eliminar intermediarios y mejorar la eficiencia en la distribución de fondos.
La reforma busca generar recursos anuales de $800.000 para fortalecer el sistema de salud, reducir la complejidad y aumentar la eficiencia en la asignación de recursos, lo que podría tener un impacto positivo en los usuarios al agilizar procesos y mejorar la transparencia en la administración de fondos.
Enfoque en la Prevención y Promoción de la Salud
La reforma del sistema de salud en Colombia busca un enfoque integral y preventivo, priorizando la salud como derecho fundamental para todos los ciudadanos. Con principios como dignidad humana, universalidad y equidad, se busca garantizar acceso oportuno y de calidad a servicios de salud, con énfasis en la atención primaria y la prevención de enfermedades. Los Territorios de Salud, adaptados a características regionales, serán clave para establecer redes integradas y centros de atención primaria.
La reforma incluye estrategias como el Sistema Público Integrado de Información en Salud y un Régimen Laboral Especial en Salud para mejorar condiciones laborales y garantizar personal sanitario capacitado. Se abordan determinantes sociales en salud y se fomentan hábitos saludables a través de políticas públicas, destacando la participación ciudadana como herramienta crucial. El modelo busca la rentabilidad social sobre la económica, con el objetivo de mejorar la atención en todo el territorio colombiano y garantizar acceso a medicamentos.
Atención Primaria y Descentralización
La reforma de salud en Colombia busca fortalecer la atención primaria y descentralizar los servicios de salud para lograr un acceso más equitativo y eficiente a la atención médica. Se propone la creación de Fondos de Salud Municipales y Departamentales, financiados por ingresos nacionales y recursos propios, respectivamente, con el objetivo de financiar instituciones de atención básica y promoción de la salud. A través de los Territorios de Salud, se establecerán Fondos Regionales, financiados por aportes de seguridad social, para coordinar y financiar servicios en regiones integradas.
A nivel nacional, se gestionará un Fondo Nacional para situaciones de emergencia y un sub-Fondo para enfermedades raras. La reforma aborda también el crecimiento del gasto en medicamentos mediante una política farmacéutica actualizable cada cuatro años. Este enfoque descentralizado y fortalecido en la atención primaria tiene el potencial de mejorar la accesibilidad a la atención médica, especialmente en áreas remotas, y agilizar la toma de decisiones a nivel local.
Desafíos y Críticas
La propuesta de reforma al sistema de salud en Colombia, liderada por Gustavo Petro y su equipo, ha suscitado una cascada de críticas y preocupaciones. Uno de los elementos más controvertidos es el cambio radical que implicaría, limitando inicialmente el número de centros pero aspirando a establecer una red única de atención en el país.
La reforma busca fortalecer la medicina preventiva mediante equipos de médicos que recorran el territorio, atendiendo y previniendo dolencias entre la población. Además, plantea considerar la salud como un pilar integral, involucrando a otros ministerios como Agricultura y Planeación. Esta aproximación intersectorial reconoce la importancia de abordar problemáticas como la potabilización del agua para prevenir enfermedades infecciosas.
No obstante, las críticas no se han hecho esperar. Una de las principales preocupaciones es la posible centralización del sistema, convirtiendo al Estado en el único pagador. Esta inquietud se basa en experiencias previas, como el Instituto de Seguro Social, que enfrentó problemas operativos y financieros en los años 90. La propuesta también ha generado temores sobre la continuidad del «aseguramiento en salud», un sistema solidario que subsidia los servicios de personas con menores ingresos mediante los pagos de aquellos con mayores ingresos.
Internamente, la propuesta ha generado tensiones en el gabinete presidencial, incluso provocando la salida del ministro de Educación, Alejandro Gaviria, quien expresó diferencias con la idea de relegar a las EPS a un papel operativo. Además, un documento filtrado reveló críticas de altos funcionarios del Gobierno respecto a puntos ciegos de la reforma. Esto resalta la complejidad y el alcance del debate, que va más allá de la esfera de la salud y abarca consideraciones políticas y administrativas.
