«Un día de orgullo nacional, el último juego en la MLB de uno de los más destacados peloteros venezolanos, Miguel Cabrera, atleta que deslumbró en los Marlins de Florida, los Tigres de Aragua y los Tigres de Detroit, demostrando con creces su nivel y profesionalismo.
Desde Venezuela, en especial los amantes del Béisbol, te decimos ¡Felicitaciones Miggy!», escribió el Presidente Maduro en su red social @NicolasMaduro
El último día en la carrera profesional del Miguel Cabrera empezó de la misma manera que los dos anteriores, con varias sorpresas preparadas por los Tigres, para honrar la trayectoria del venezolano.
Luego de entonarse las notas del himno de Venezuela – cantado en parte por los cientos de venezolanos presentes en el estadio – cada uno de los 41,135 aficionados que llenaron el Comerica Park por segundo día consecutivo levantaron una cartulina que había en sus asientos, para formar un mosaico a lo largo de todas las gradas que leía “Gracias Miggy”, el logo de los Tigres, y las cifras de ‘3,000’, ‘500’ – en referencia a la cantidad de hits y jonrones que empalmó el venezolano a lo largo de sus 21 años de carrera – y el número ’24’ de su uniforme.
Cabrera confesó sentirse cautivado por la cantidad de aficionados venezolanos presentes en el estadio, mencionando que sintió el apoyo de su gente desde el primer momento que pisó un terreno de béisbol.“Gracias”, dijo en dirección a los aficionados venezolanos. “Pero un ‘gracias’ no es suficiente, ante todo el cariño que recibí durante toda mi carrera. [Estoy] muy emocionado. Gracias por el soporte. Estoy contento”.
Tras colgar los ganchos por última vez, el venezolano se despide con con 3,174 hits (17mo puesto en la historia), 511 cuadrangulares (25to), 627 dobles (13ro) y 1,881 empujadas (13ro) junto una línea de promedios de .306/.382/.518 y un OPS de .900. Además, es uno de apenas ocho jugadores en la historia en haber conectado al menos 500 jonrones y 3,000 imparables.
Además, el maracayero termina con dos Premios Jugador Más Valioso, 12 convocatorias al Juego de Estrellas, siete Bates de Plata, cuatro títulos de bateo. Además, ganó la Triple Corona en el 2012 y alzó el título de Serie Mundial con los Marlins en el 2003.
Y ahora, ¿qué queda para el venezolano?
“Mañana me toca llevar a los niños a la escuela. Es difícil. Tengo una vida normal ahora”, culminó entre risas.
T/CO y MLB.com