Un “pastor” de la Iglesia cristiana evangélica Casarapa, ubicada en Guarenas, estado Miranda, identificado como Celedonio Monasterios, fue denunciado ante las autoridades del Ministerio Público por su presunta participación en el abuso sexual cometido contra la integridad de diez mujeres.
Este caso fue denunciado en el MP por Abel Ocasio, hermano de una de estas diez personas y quien se encargó de recopilar los testimonios de otras agraviadas que actualmente están en el exterior. Ocasio, quien formó parte de la referida organización religiosa, tiene un familiar que fue víctima de Monasterios.
Ocasio, quien reside en el exterior, regresó a Venezuela durante el pasado mes de marzo para formalizar la denuncia y desde ese entonces tuvo varias disputas con representantes de esta iglesia y algunos de sus creyentes, quienes han intentado obligarlo a no denunciar.
Pese a ello, Ocasio usó sus redes sociales para exponer el caso y se acercó a varias de las víctimas para instarlas a denunciar y algunas consiguieron su apoyo, según informó el periódico El Pitazo en su página web.
Ocasio, quien formó parte de la iglesia hasta que emigró, aseguró que cuando comenzaron las denuncias de mujeres abusadas contra Celedonio Monasterios, la directiva del templo decidió reunirlas y escucharlas.
Agregó que las víctimas son todas cristianas y contaron a sus pastores que Monasterios tuvo acercamientos inapropiados, las persuadió de sostener relaciones sexuales con él, tocó las partes íntimas de algunas y les indicó que su actitud era en nombre de Dios.
“En esas reuniones, los pastores encargados quisieron hacer justicia por ellos mismos, y apelando a la fe cristiana, las instaron a perdonar a su agresor”, indicó Ocaso.
Añadió que “incluso, en varias ocasiones les dijeron que los acercamientos inapropiados y el hecho de que tocara sus partes íntimas sin su consentimiento no era abuso sexual. Algunas les creyeron y decidieron dar un paso atrás y no denunciar”, expresó el denunciante.
Oriana Lorenzo con información de NAD
