Un grupo de familiares de los pacientes de la Unidad de Diálisis se ha congregado en una protesta silenciosa pero desgarradora. La razón detrás de su clamor es simple pero urgente: la falta de suministro eléctrico está poniendo en peligro la vida de quienes dependen de este vital procedimiento médico.
Desde tempranas horas del día, los pacientes junto a sus seres queridos aguardan afuera de la unidad, esperando que la electricidad vuelva y les permita acceder al tratamiento que les mantiene con vida.
“Hacemos un llamado al Dr. Cabrera que se apersone aquí, que nos dé soluciones, tenemos muchos pacientes descompensados, no podemos esperar más, queremos soluciones”, exclama con preocupación Sonia Bonilla, familiar de un paciente renal.
“Cada minuto de retraso es un minuto de sufrimiento innecesario”, agrega Bonilla.
Mientras tanto, en la esquina de la carrera 25 con calle 34 de Barquisimeto, la protesta continúa clamando por el derecho fundamental a la salud.
Carla Martínez / Noticias Barquisimeto