El alero de los Lakers se convierte en el primer jugador en la historia de la NBA que alcanza esa barrera que se antoja inalcanzable.
El jugador de Los Lakers establece a sus 39 años una marca prácticamente inalcanzable.
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LeBron James llevaba 1.204 partidos consecutivos, desde el 6 de enero de 2007, anotando al menos 10 puntos. No era plan que interrumpiera esa racha, la más larga en la historia de la NBA, justo el día que necesitaba nueve para convertirse en el único jugador que alcanza los 40.000 en su carrera. Así que, en la derrota ante los Nuggets por 114-124, anotó 26 para conseguir otro hito para la eternidad: 40.017 puntos y subiendo.
“Nadie lo ha hecho nunca. Para mí, estar en esta posición en este momento de mi carrera, es genial. Poder lograr cosas en esta Liga, con los mejores jugadores que jamás hayan jugado, ha sido un sueño y todas las hazañas e hitos a lo largo de mi carrera significan algo para mí. Obviamente, hay un orden jerárquico sobre cuáles son más importantes que otros, pero mentiría si dijera que esto no significa nada, porque absolutamente lo hace”, aseguraba antes del encuentro LeBron, que alcanzó la histórica cifra con una bandeja al inicio del segundo cuarto tras deshacerse de la defensa de Michael Porter Jr. con un reverso. “Odio que esto pasara en una derrota. Se trata de ganar”, dijo después.
“Hay un orden jerárquico sobre cuáles son las mejores hazañas, pero mentiría si dijera que esto no significa nada”.
LeBron James, alero de los Lakers..
El 8 de febrero del año pasado, el alero de los Lakers se convirtió en el máximo anotador en la historia de la NBA superando los 38.387 puntos con los que se retiró Kareem Abdul-Jabbar. Ahora derriba otra barrera. Una que se antoja infranqueable. Parece uno de esos registros que perdurarán por siempre. Como los 100 puntos de Wilt Chamberlain, curiosamente también conseguidos un 2 de marzo.
Porque el jugador en activo que más cerca tiene LeBron en la lista de máximos anotadores de la competición es Kevin Durant y lleva 28.372 puntos, casi 12.000 menos. Luka Doncic, por ejemplo, tendría que mantener sus actuales medias anotadoras y jugar hasta 2039, cuando cumpliera 40 años. Si alguien se atreve a acercarse al registro de ‘King’ James es probable que aún no haya nacido.
Máximos anotadores en la historia de la NBA
- LeBron James: 40.017
- Kareem Abdul-Jabbar: 38.387
- Karl Malone: 36.928
- Kobe Bryant: 33.643
- Michael Jordan: 32.292
- Dirk Nowitzki: 31.560
- Wilt Chamberlain: 31.416
- Shaquille O’Neal: 28.596
- Kevin Durant: 28.372
- Carmelo Anthony: 28.289
Tendría que ingresar muy pronto en la NBA, como hizo LeBron, con 19 años. Tendría que permanecer en la Liga durante más de 20 temporadas, como LeBron, que está en su vigesimoprimera. Y, sobre todo, tendría que mantener un nivel estelar durante todo ese tiempo, como LeBron, que está promediando 25,3 puntos esta temporada. Ningún jugador en la historia ha tenido sus cifras ni su impacto habiendo cumplido ya los 39 años. Como ejemplo, su racha actual: nadie a esa edad había acumulado seis partidos consecutivos llegando a los 25 puntos. Hasta ahora.
Se habla mucho sobre el ‘prime’ de los jugadores, ese momento en el que alcanzan la cima de su carrera. LeBron lleva instalado ahí dos décadas. En sus 21 temporadas en la NBA, sólo en la primera se quedó por debajo de los 25 puntos de media. En aquel curso 2003-04 hizo unos para nada desdeñables 20,9. Desde entonces, con una regularidad digna de un metrónomo, sus promedios se han movido entre los 31,4 de la campaña 05-06 a los 25,0 justos de la 19-20.
40.000+10.000+10.000
Aunque acumule numerosos récords de anotación, James no sólo ha labrado su leyenda a base de canastas. Es el único jugador de siempre en la NBA que acumula 10.000 puntos, en su caso multiplicados por cuatro, 10.000 rebotes (puesto 33 en el ránking histórico) y 10.000 asistencias (cuarto puesto sólo por detrás de John Stockton, Jason Kidd y Chris Paul). Cifras bestiales que ayudan a alimentar la comparación con Michael Jordan y el debate sobre quién es el mejor jugador de la historia.
A ello se podría unir que también es el jugador que más veces ha sido seleccionador para el All Star, 20 con la de la presente temporada, pues sólo faltó en su año de rookie; el que ha formado parte en más ocasiones de los mejores quintetos de la temporada, con 19; el máximo anotador en la historia de los playoffs, sumando ya 8.023; y el que más victorias ha conseguido en las series por el título, con 182.
“No vamos a ver esto por mucho más tiempo y tenemos que apreciarlo mientras esté aquí. Me siento honrado de poder entrenarlo y verlo de primera mano”.
Darvin Ham, entrenador de los Lakers.
“No vamos a ver esto por mucho más tiempo y tenemos que apreciarlo mientras esté aquí… Simplemente apreciarlo por lo que le ha dado al juego, lo que continúa dándole al juego y su conocimiento, su desempeño”, dijo Darvin Ham, entrenador de los Lakers, “honrado de poder entrenarlo y verlo de primera mano”. Porque todo lo que hace James tiene a estas alturas tintes épicos. Cada una de sus actuaciones es ya la historia pasando ante nuestros ojos.
Apenas hay indicios de decadencia en un LeBron que gasta un millón de dólares al año en cuidar su cuerpo. Dinero muy bien invertido por lo que se ve. La próxima temporada cumplirá los 40 años en la pista (el 30 de diciembre) y seguirá jugando. ¿Dónde? Finaliza contrato con los Lakers y tiene una opción de jugador para continuar por 51,4 millones de dólares. Los rumores se suceden, pero él no ha desvelado nada. Lo único que está claro es que llevará su ejercicio de longevidad un poco más allá y sus estadísticas, a unas cotas inimaginables e inalcanzables. Sus 40.000 puntos y todos los que vengan detrás quedarán para la eternidad.
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