Los familiares de los pacientes recluidos en la sala de emergencias del Hospital Central Universitario Antonio María Pineda pasan un «calvario» en las afueras de dicha sala mientras esperan por su familiar.
Entre cartones y sábanas, se encuentran los familiares, quienes señalan que han recibido malos tratos de algunas personas que forman parte del personal del Hospital.
«Es terrible, no te dejan entrar, no puedes saber nada, ni te dicen nada, prácticamente dejan morir al familiar de uno ahí» declaró una consultada por Noticias Barquisimeto.
Mientras que otras personas, quienes provenían de Quibor, mencionan que desde las 6 am no saben nada de su familiar, pues el ‘portero’ que se encuentra de guardia ha sido muy déspota con ellos: «pide que esperemos a que pasen revista, pero si ya pasaron, no entiendo», declararon.
Entre tanto, otras personas indicaron que si mayor problema es con las ambulancias, pues deben de trasladar a su familiar a realizarse exámenes, y por más cerca que sea la movilización, el costó de la misma no baja de los 80 dólares.
Lo que para está, y otras familias resulta un alto costo, sin embargo les toca asumirlo, pues las ambulancias de carácter público «brillan por su ausencia».
«Es que esto es un problema, incluso acá en emergencias todos están cuadrados para llevarse su ‘tajada’ de las ambulancias» declaró una señora que estaba en las afueras.
En este sentido, la mayoría de familias consultadas en las afueras de la sala de emergencias, piden a los trabajadores del centro hospitalario un poco más de empatía con las personas, y también que se pongan «en sus zapatos».
Rubén Conde/Noticias Barquisimeto