La enfermedad de Kawasaki, una afección que afecta principalmente a niños menores de cinco años, ha mostrado un aumento en su incidencia en los últimos años. Esta enfermedad inflamatoria puede causar serias complicaciones cardíacas si no se diagnostica y trata a tiempo.
Los síntomas de la enfermedad de Kawasaki suelen aparecer en varias etapas. Entre las manifestaciones más comunes se encuentran:
- Fiebre alta persistente que dura más de cinco días.
- Erupciones cutáneas, a menudo en el tronco.
- Inflamación y enrojecimiento de los ojos (conjuntivitis).
- Cambios en los labios, como sequedad y agrietamiento, así como una lengua de fresa.
- Inflamación de los ganglios linfáticos en el cuello.
El diagnóstico de la enfermedad de Kawasaki se basa en la evaluación clínica, ya que no existe una prueba específica para confirmarla. «La importancia de un diagnóstico temprano, incluye la revisión de los síntomas y el historial médico del paciente. Se pueden realizar análisis de sangre y ecocardiogramas para evaluar la función cardíaca y detectar posibles complicaciones», enfatizó el Dr. Antonio González Mata, pediatra infectólogo.
«Con un enfoque adecuado, es posible manejar la enfermedad de Kawasaki y proteger la salud cardíaca de los pequeños a lo largo de su vida», advierte el Dr. González Mata sobre la creciente prevalencia de esta enfermedad y la necesidad de mayor conciencia entre padres y profesionales de la salud para garantizar que los niños reciban la atención necesaria.
El tratamiento inmediato es crucial para reducir el riesgo de daño cardíaco. La detección y tratamiento tempranos son fundamentales para minimizar el riesgo de enfermedades cardíacas a largo plazo en los niños afectados. El seguimiento regular con un cardiólogo pediátrico es esencial para monitorear la salud cardiovascular a medida que el niño crece.
Carla Martínez / Noticias Barquisimeto