La cartera de crédito mantuvo su tendencia alcista en septiembre, al ubicarse en 89 mil 967,47 millones de bolívares, equivalentes a 2 mil 437 millones de dólares al tipo de cambio oficial de cierre de mes, con un crecimiento mensual, en moneda nacional, de 7,8 % y una expansión interanual de 120,2 %.
En términos reales, el crédito bancario aumentó 105,31 % en los últimos 12 meses reportados al compararse con los mil 187 millones de dólares a los que fue equivalente en septiembre de 2023, de acuerdo con la estimación de la consultora especializada Aristimuño Herrera & Asociados.
Este comportamiento permitió una mejora en el índice de intermediación financiera que cerró septiembre en 40,42 %, con un aumento de 0,75 puntos en comparación con agosto pasado y un alza de 2,68 enteros, frente al noveno mes de 2023.
Aunque la intermediación se elevó, el crecimiento de este margen entre depósitos totales y volumen de préstamos otorgados sigue siendo bajo en el mercado venezolano, debido a factores como el elevado encaje legal y la reducida rentabilidad de la actividad crediticia ante la indexación de la cartera. No obstante, en las últimas semanas ésta ha subido un poco por el movimiento observado en el tipo de cambio.
Retrocede la morosidad
El índice de morosidad de la cartera de créditos detuvo su tendencia ascendente en septiembre para ubicarse en 1,27 %, 0,11 puntos porcentuales por debajo del reportado en agosto; sin embargo, al compararse con septiembre del año pasado este indicador subió 0,63 puntos.
La morosidad de la cartera crediticia es reducida, a pesar de los riesgos que existen en el mercado venezolano; sin embargo, el índice de cobertura de la mora se ubicó en 220,81% en septiembre, con un aumento de 17,47 puntos en comparación con agosto.
La cartera inmovilizada de la banca venezolana, al cierre de septiembre, ascendió a mil 144,13 millones de bolívares -31 millones de dólares al tipo de cambio oficial-, y se redujo en 0,7 % frente a agosto; pero subió 335,1 % en los últimos 12 meses reportados.
Los datos indican que el nivel de provisionamiento de las contingencias de cartera está en niveles claramente adecuados; de hecho, la provisión para cobertura por mora se ubicó en septiembre en 2.526,35 millones de bolívares (US$68,43 millones de dólares oficiales).
La cartera de créditos pierde peso como fuente de ingresos
Los ingresos derivados de la actividad crediticia representaron, al cierre de septiembre, apenas 28% de los ingresos totales, una proporción que cayó 17 puntos porcentuales en 12 meses desde 45% en el noveno mes del año pasado.
Los factores que explican este fenómeno son claramente conocidos, ya que la restricción del crédito es una consecuencia de la estrategia de contención de la liquidez que aplica el Ejecutivo Nacional para mantener bajo control a la inflación y el tipo de cambio.
Incluso con los descuentos, los requerimientos de encaje legal siguen siendo elevados; de hecho, según la data del Banco Central de Venezuela (BCV) solo en 10 cortes semanales en lo que va de 2024, la banca no ha reportado déficit de cobertura.
De hecho, los alivios de requerimientos de encaje se registraron entre mediados de julio y septiembre, pero con las presiones existentes sobre el mercado cambiario y el riesgo de rebrote inflacionario, el ente emisor parece dispuesto a regresar a su estrategia de elevar este factor.
No obstante, los ingresos financieros de la banca se han mantenido estables a lo largo de los últimos 12 meses reportados. En septiembre cerraron en 18 mil 942,37 millones de bolívares, con un aumento de 2,47 % en comparación con el mismo mes de 2023.
Rubén Conde con información de NAD
