«El primer error es de los padres»: Orientadora de la conducta Solimar Mogollón

Las primeras equivocaciones que se suelen ocasionar dentro de un seno familiar cuando un niño tiene problemas en su conducta, vienen desde los mismos padres, que entran en una etapa de negación y en muchas ocasiones son incapaces de reconocer que su hijo está presentando un comportamiento inusual.

«El primer error es cuando el padre está completamente vendado y no acepta (…) recordando que todos tenemos una condición especial de alguna manera, los que usamos lentes, los que tenemos problemas auditivos, los niños que usan aparatos ortopédicos, ya eso nos hace tener una condición diferente», así lo estableció la docente y orientadora en la conducta infantil, Solimar Mogollón, invitada en el programa Actualizando, conducido por Zuleydy Márquez, a través de las pantallas de Somos Televisión.

Así mismo, indicó que a partir de los siete años es cuando un niño debe ser tratado por algún orientador, previo a eso, solo debería visitar a pediatras y neuropediatras. De igual forma, agregó que son los docentes quienes deben ser los primeros en percatarse de conductas no operativas, que son aquellas que se salen de los patrones no convencionales, estas pueden ser como estar muy inquieto en clases o llegar muy irritado a la institución por las mañanas.

A su vez, agregó que «las conductas son de dos tipos, está irritado o demasiado pasivo, y es allí donde el docente debe llamarle la atención del porqué ese estudiante está de esa forma, puede ser que no durmió bien, que está pasando por un duelo, recordemos que, ahorita hay muchos niños que están viviendo duelo por separación de padres (…) todo esto lo puede retraer».

De esta misma manera, recomendó no exponer a los infantes a dibujos animados que posean secuencias excesivamente rápidas o colores muy vivos, ni tampoco dejárselos ver por una duración prologada, ya que son estas características las que crean adicción y los sobre estimula. Cabe resaltar que, según la OMS, entre el 3% y el 7% de la población infantil mundial, sufre de trastornos a raíz de la sobre estimulación.

En ese orden de ideas, puntualizó que hay distintos trastornos, como del lenguaje o conducta. «Uno de lo mas comunes es cuando su cerebro es rápido, o sea, su pensamiento es muy rápido y no lo puede adecuar a su voz, entonces ahí es donde tararea, porque lo que está pensando no es lo mismo de como lo quiere decir, pero eso solamente lo diagnostica un medico». Detalló que también existen aquellos que pertenecen a la rama del aprendizaje, que es cuando el alumno presenta bajo nivel de lectura o concentración en la clase.

Igualmente, explicó que lo primero que se debe tomar en cuenta para tratarlos es cuantificar, es decir, medir cuantas veces y desde cuando viene pasando la situación, porque si la misma excede los seis meses, ya es patológica. Por otro lado, dictaminó las diferencias entre comportamiento y conducta, donde la primera es como la persona interactúa con la sociedad y la segunda, se genera a partir de un estimulo.

Finalmente, afirmó que el proceso de maduración entre hombres y mujeres es distinto; el varón modifica su edad mental cada siete años, en cambio, la mujer actúa según su edad biológica. Además, concluyó comentando sus recomendaciones dedicadas todos los «nuevos padres», como poseer horarios controlados para todo y ofrecer tiempo de calidad, no de cantidad.

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Sander Torrealba / Noticias Barquisimeto