Cada 11/11 recordamos las hazañas del dos veces número uno de la pelota criolla.
Cuando se habla de Luis Aparicio es inevitable pensar en Maracaibo y el Estado Zulia. Nuestro único miembro del Salón de la Fama del béisbol de Las Grandes Ligas ha llevado a lo más alto el nombre de nuestra Ciudad y nuestra región y es sin duda, uno de los hijos más ilustres de la Capital Zuliana.
Leer También: Navegantes del Magallanes de Venezuela Campeones del primer torneo de Choque de Gigantes en Miami
Desde su inclusión en el templo de los inmortales de Cooperstow, en Nueva York, el 12 de agosto de 1.984 han sido innumerables los reconocimientos para este ejemplar deportista venezolano cuyo legado va mucho más allá de lo realizado dentro de los diamantes del béisbol de Venezuela, del Caribe u de los Estados Unidos.
Quizás el máximo reconocimiento que podemos otorgarle a nuestro Gran Don Luis Aparicio es seguir ese ejemplo que ha dado como ciudadano, ese que lo ayudó a recorrer su camino con éxito, ese que lo ayudo a formar una familia llena de unos valores fundamentales que ha ido transmitiendo de generación en generación para bien de nuestra ciudadanía.
Don Luis Aparicio es el ejemplo fiel de que con lucha, entrega y sacrificio, constancia y dedicación, todas la metas son alcanzables, y ese es el modelo que debemos seguir para construir esa Venezuela de bien, plagada de ciudadanos ejemplares, y que permitan recuperar ese respeto y esos valores que se han difundido en nuestra sociedad actual.
Por esa razón, es preponderante no solo los Marabinos y loa Zulianos, si no todos los venezolanos sigamos ese modelo de vida que es nuestro gran Don Luis Aparicio para crear una Venezuela posible que todos anhelamos.
Elegancia, categoría y excelencia son tres de las palabras que definen al Gran Don Luis Aparicio Montien, el dos veces número uno del béisbol venezolano.
Gracias a la magnífica impronta que dejó en cada parque de pelota en el que jugó no solo a nivel profesional sino amateur, se ganó el derecho de ser celebrado durante un día. Ese es el 11 de noviembre; en referencia a su mítico número, retirado por los ocho equipos de la LVBP y por los Medias Blancas de Chicago.
Don Luis estaba destinado a nunca ser «segundo de nadie» y eso fue lo que sucedió. Desde su llegada al mejor béisbol del mundo -después de forjarse una gran reputación en la pelota amateur y profesional de Venezuela-, se hizo sentir con su velocidad y habilidad para jugar el campocorto; una posición que ya había hecho famosa Alfonso «Chico» Carrasquel entre los jugadores venezolanos.
Incluso, era «Chico» el torpedero titular de los ‘patiblancos’ antes de la llegada de Luis Aparicio. Por lo que, de algún modo fue como un paso de antorcha parecido al que su padre le hizo aquel 18 de noviembre de 1953 donde le entregó el guante durante su debut profesional en Maracaibo.
Se estableció por su multidorada defensiva
La elegancia del «Pequeño Louie» incluyó 8.016 asistencias y 4.548 outs realizados en 2.581 juegos en su posición. A la hora de su retiró, se fue como el jugador con más desafíos en el campo corto. Su categoría lo hizo ganar nueve guantes de oro; la segunda mayor cantidad para un venezolano en las Grandes Ligas -solo superado por Omar Vizquell-. Su excelencia lo llevó a cometer apenas 366 errores 22.408,2 innings defendidos como torpedero.
Todo ello por supuesto confluyó; tras 18 temporadas como ligamayorista activo, en haber sido seleccionado en 1984 con el 84.6% de las boletas, para ser integrante del Salón de la Fama de Cooperstown. Es hasta ahora el primer y único venezolano. Y, en ese entonces, el tercer latino detrás de Roberto Clemente (1973) y Juan Marichal (1983) con un nicho en el templo de los inmortales
Cabe destacar que el Día de Luis Aparicio fue instaurado el 11 de noviembre de 2011. Ello, gracias a un decreto del entonces gobernador del estado Zulia, Pablo Pérez Álvarez. Desde entonces, la celebración se ha extendido a todo el territorio nacional, siendo llevada por la entrega que reflejaba el nacido en Santa Lucía (Maracaibo) cada vez que pisaba un parque de pelota y el posterior legado que dejó en la pelota criolla.
Hender “Vivo” González
Noticias Deportivas
