La vitamina D es uno de los nutrientes necesarios para que nuestra salud se mantenga en buen estado. Interviene en procesos importantes del organismo y resulta esencial para el correcto desarrollo del cuerpo, sobre todo en poblaciones infantiles. Por eso es muy importante evitar la deficiencia de esta vitamina y poner atención a tu cuerpo, ya que este puede expresar la falta de vitamina D con ciertos síntomas.
Esta vitamina es tan importante para el cuerpo que el organismo puede producirla por sí mismo. Sin embargo, cuando hay una deficiencia de este nutriente se puede sufrir de efectos como la fatiga. Un síntoma muy evidente de la falta de vitamina D es el cansancio constante, incluso aunque se haya dormido más horas de lo habitual.
Para que el organismo pueda producir su propia vitamina D es necesario la exposición a la luz del sol. Esta sencilla actividad ayuda a que el cuerpo genere este nutriente. Si al cuerpo le faltara vitamina D para llevar a cabo sus procesos de forma correcta, se podría experimentar dolor muscular, pues este es uno de los síntomas con los que el organismo avisa sobre la deficiencia de esta vitamina.
Este nutriente se puede obtener también de algunos alimentos, generalmente de origen animal como el huevo, el hígado o los pescados grasos. Otro de los síntomas que indican que el cuerpo podría experimentar una falta de vitamina D es el dolor en las articulaciones. Zonas como las rodillas, los hombros, las caderas o los codos suelen verse muy afectadas por la falta de esta vitamina.
Al intervenir directamente en la absorción del calcio, es muy importante para mantener en buen estado de los huesos. Por eso es que resulta tan necesario mantener vigilado el cuerpo si presenta los síntomas de la insuficiencia de vitamina D. Incluso, la falta de este nutriente puede afectar la salud mental, ya que uno de los síntomas de la deficiencia resulta ser la depresión.
Carla Martínez / Con información de VTV
