El aspecto negativo de la cebolla es que nos hace llorar, sin embargo, es un auténtico tesoro nutritivo y una imprescindible hortaliza en la gastronomía y esconde numerosas propiedades nutritivas y medicinales, es rica en minerales, así como en calcio, magnesio, cloro, cobalto, cobre, hierro, fósforo, yodo, níquel, potasio, silicio, cinc, azufre y bromo.
La cebolla tiene vitaminas A, B, C y E, y su planta contiene esencias volátiles sulfurosas que le confieren características del sabor picante y uno de eso componentes se disuelve con rapidez en agua y produce ácido sulfúrico, de ahí que nos haga saltar las lágrimas cuando la cortamos.
Respecto a la cocina, se puede usar sus beneficios para consumirla cruda, dado a que estimula mejor el funcionamiento del hígado, el páncreas y la vesícula, aunque al cocinarla no se producen grandes pérdidas en sus propiedades nutritivas.
A la hora de comprarla, se debe elegir las cebollas que tengan el bulbo firme, sin brotes y que conserven intacta la piel, y para su conservación se debe guardar en un lugar seco y ventilado, tampoco debe estar amontonada con otras hortalizas.
Carla Martínez / Con información de VTV
