La civilización del antiguo Egipto es una de las más célebres y amadas por quienes se interesan por la historia de la Antigüedad. Si bien muchos de sus misterios ya han sido resueltos por egiptólogos y arqueólogos, incluida la cuestión de la construcción de las pirámides, aún quedan enigmas sin responder.
La muerte de Tutankamón
Cómo fueron los últimos días de uno de los reyes egipcios más conocidos, todavía no se sabe de manera muy clara. La muerte de Tutankamón, cuyo nombre puede ser traducido como ‘la imagen viva de Amón’ (uno de los dioses fundamentales en el panteón egipcio), considerado erróneamente hijo de Akenatón, no ha sido resuelta por los investigadores, que continúan proponiendo varias interpretaciones.
Entre las versiones que circulan se dice que fue asesinado en la lucha por el trono, que murió debido a una enfermedad e incluso que fue tragado por un hipopótamo. En cuanto a esta última, se trata de una leyenda: si alguien era tragado por un hipopótamo, le esperaba una buena vida en el más allá.
En 2016, se realizó el análisis de la momia del difunto rey y se estableció que la causa más probable de la muerte es la combinación de osteonecrosis y malaria, agravada por otras enfermedades.
De hecho, las extremidades de la momia estaban deformadas, el pie derecho padecía de hipofalangismo, además de que tenía la mandíbula superior saliente y posiblemente sufriera de osteonecrosis. En consecuencia, sugieren los científicos, el faraón murió a los 18 años por una mezcla de varias enfermedades heredadas. En este sentido, recuerdan que los faraones se casaban son sus hermanas para no «contaminar» la sangre real.
¿Por qué desapareció Nefertiti?
Nefertiti, esposa de Akenatón, es una de las figuras más enigmáticas en la historia del antiguo Egipto, y algunos egiptólogos creen que incluso podría haber gobernado el país junto con su marido o heredar la corona tras su muerte, cambiando su nombre a Neferneferuatón.
No obstante, no se sabe por qué la reina, cuyo origen tampoco está claro, desapareció de todos los registros reales de manera repentina. Su nombre se traduce como ‘la bella ha llegado’, pero no se precisa de dónde llegó una de las mujeres más poderosas del antiguo Egipto, aunque algunos científicos opinan que podría ser oriunda de la Mesopotamia. Del mismo modo, no se sabe por qué desapareció del panorama político después de 16 años de reinado de Akenatón, un año antes de su muerte.
Aún no hay teorías ni versiones verosímiles que puedan ser respaldadas por la mayoría de los especialistas.
¿Quién es el primer rey de Egipto?
En diferentes fuentes se menciona de manera repetida el nombre Menes (Meni, en el antiguo egipcio), sin embargo, los historiadores no pueden responder a una pregunta muy sencilla: ¿quién era?
De acuerdo con la lista real de Abidos, un bajorrelieve con los 76 nombres de los reyes más importantes que precedieron a Seti I (siglo XIII a. C.), y el Canon real de Turín, un papiro de la época de Ramsés II, entre los reyes de la primera dinastía real se encuentra el faraón del Alto y Bajo Egipto Menes, pero en ambas listas el lugar en el que se describe su actividad política está dañado, y no es posible restaurarlo.
La mayoría de los egiptólogos creen que Menes es Narmer, un personaje famoso que aparece en una célebre paleta, matando a sus rivales y conquistando el Bajo Egipto. No obstante, para algunos científicos Narmer es el padre Menes, mientras que otros afirman que Menes es Horus Aha, uno de los reyes más poderosos de la primera dinastía real.
Hoy en día, entre los expertos en Egipto de la nueva generación gana popularidad la versión de que el verdadero fundador del Estado unido es Horus Escorpión II, retratado en su maza con una azada en una mano y una corona blanca del Bajo Egipto, cuya tumba podría estar ubicada en la necrópolis de Umm el Qaab, al sur del país.
¿Existió una reina combatiente?
Durante la época de los grandes disturbios tras la llegada de los hicsos, un conjunto de pueblos con los que se relaciona la caída del Reino Medio a mediados de siglo XVII a. C., la reina Ahhotep, después de la muerte en batalla de su esposo, el rey Seqenenra, dirigió desde Tebas, la capital sureña del país, el asedio a Avaris, el centro de los hicsos, al norte de Egipto.
Los egiptólogos sugieren que por sus incansables intentos de expulsar a los invasores del país y restaurar la integridad del Estado, su hijo, el nuevo rey, en un gesto de agradecimiento, concedió a su madre tres grandes moscas de oro, el mayor galardón militar posible. Era su forma de reconocer los grandes esfuerzos y sacrificios a los que se había sometido la reina valedora.
¿Los etruscos en Egipto?
Un funcionario de bajo rango de Croacia compró en 1848 un sarcófago con la momia de una mujer desconocida en Alejandría, Egipto. Luego de su fallecimiento, el hermano donó la momia al Instituto Estatal de Croacia, donde llamó mucho la atención por las inscripciones halladas en sus vendajes. Resultó que el cuerpo de la mujer estaba envuelto en trozos del texto más largo conservado conocido en lengua etrusca, que se remonta al 250 a. C.
A pesar de que el idioma etrusco se mantiene en gran medida sin descifrar, después de que fueran identificadas algunas frases y palabras, los científicos concluyeron que el texto es una especie de un calendario litúrgico, con fechas y preceptos religiosos vinculados a sacrificios ofrecidos a distintas deidades de los etruscos.
Todavía no se sabe cómo pudo haber llegado a Egipto y por qué la momia fue envuelta con él. Ahora bien, se puede sugerir que la redacción apareció allí en la época de la dominación romana de Egipto, donde, al no cumplir con su propósito litúrgico, fue cortada en tiras y utilizada por embalsamadores.
Carla Martínez / Con información de RT