A partir del próximo jueves entrará en vigor la medida que dispuso el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, para volver a imponer las visas a ciudadanos de Australia, Canadá y EE.UU.
Después de una serie de postergaciones, el Gobierno brasileño aplicará de nuevo el requisito de reciprocidad que tradicionalmente ha predominado en la diplomacia de ese país.
De este modo, Brasil exigirá a otros países las mismas reglas que estos aplican con sus conciudadanos.
El expresidente Jair Bolsonaro había quebrado la tradición de reciprocidad en 2019, con el supuesto objetivo de incentivar el turismo extranjero, lo que benefició a ciudadanos estadounidenses, canadienses y australianos que ingresaron con más facilidad a Brasil. Sin embargo, los brasileños tuvieron que seguir tramitando visas para para poder viajar a esos tres países.

Cuando Lula asumió nuevamente la presidencia, en 2023, anunció que daría marcha atrás con esta política de Bolsonaro, pero tuvo que postergar en tres ocasiones el regreso del visado para los países objeto de la controversia.
La última modificación data del 9 de abril de 2024, y establece que la exención de visados solo quedará vigente hasta el 9 de abril del 2025. Dicho plazo se vence el miércoles, por lo que el jueves se reimpondrán las visas que podrán tramitarse vía electrónica o en formato impreso.
Japón también había sido beneficiado con esta medida de manera unilateral, pero en 2023 eliminó la solicitud de visa para los brasileños, por lo que se hizo efectiva la reciprocidad.
Carla Martínez / Con información de RT