Bolsas de Latinoamérica reciben golpe de volatilidad global en el lunes negro

El tan nombrado lunes negro se consolidó. Los principales índices de Wall Street abrieron la semana a la baja, con pérdidas significativas para el Dow Jones Industrial que retrocedía 895 puntos (-2,25%), y con el S&P 500 y el Nasdaq Composite cayendo entre el 2,5% y el 2,8%, respectivamente, a las 11:30 a. m. de Nueva York, de acuerdo con datos de Bloomberg.

Los resultados son la continuación de una caída generalizada en las bolsas asiáticas, con el principal índice de la bolsa japonesa, el Nikkei 225, marcando una pérdida del 12,40% al cierre de la jornada del lunes 5 de agosto de 2024. El índice MSCI Asia-Pacífico se cayó un 6,7%, borrando las ganancias del año.

“Es una reacción al reporte de desempleo (en Estados Unidos). Pero no solo es eso, ese es un factor. Hay preocupaciones de un conflicto en Medio Oriente. Estamos en pleno verano en EE.UU. y Europa, entonces no hay mucha gente que está operando (en las bolsas), y no están los inversionistas ahí para recibir el impacto o la oferta de acciones”, fueron las primeras explicaciones al lunes negro que entregó Walter Molano, economista jefe de BCP Securities, consultado por Bloomberg Línea.

Sin embargo, Molano destacó que aunque el impacto de volatilidad ya se está viendo en las bolsas de América Latina, podría no ser “sostenido”, pues en esta jornada particular, la mayoría de inversionistas está tomando una postura de “reducir riesgo y retirar apuestas”.

En la región, las bolsas con mayor caída tras la apertura son el Colcap de Colombia (-2,67%) y el Ipsa de Chile (-2,43%), con corte a las 11:46 a. m. tiempo de Nueva York. Los mercados de Perú y Argentina retrocedían alrededor de un 2% y Brasil y México menos del 1%, a la misma hora.

Presión en las bolsas del mundo: ¿qué tienen que ver EE.UU. y Japón?

Los últimos datos económicos de Estados Unidos han sido más débiles de los esperado, incrementando los temores de una recesión en una de las principales potencias del mundo, después de meses en los que los principales analistas y bancos hablaron de un “aterrizaje suave”.

“Tenemos el inicio de una semana con una marcada desvalorización en los principales activos de riesgo y una búsqueda de activos refugio concentrada en bonos del Tesoro, después de una serie de reportes de actividad económica que vienen por debajo de lo esperado en EE.UU. y un efecto que termina amplificando los efectos secundarios del anuncio del Banco Central de Japón de gradualmente ir disminuyendo un esquema que duró décadas de inyección de liquidez y que fue soporte de posiciones apalancadas en el mercado japonés como en el resto del mundo”, dijo Diego Camacho, economista senior de Research en Credicorp Capital, a Bloomberg Línea.

El viernes pasado, la Oficina de Estadísticas Laborales reveló que la contratación en EE.UU. en julio fue más lenta de lo esperado, y la tasa de desempleo subió al nivel más alto en casi tres años, llegando al 4,3%.

Pero, además, el Banco Central de Japón decidió modificar su política monetaria, incrementando su tasa de interés a 0,25%, la segunda decisión en este sentido en los últimos 17 años, marcando un cambio en su estrategia e impactando también en el mercado de acciones y de divisas del mundo.

De acuerdo con Molano, de BCP Securities, son muchos los fondos de inversión o inversores individuales los que acostumbraban obtener capital en yenes (divisa de Japón), en donde el costo era casi de 0%, para después convertir este dinero y comprar bonos en divisas donde la tasa de interés es más alta, “haciendo una buena prima”.

“El costo de capital era casi cero, mientras que el retorno en divisas latinoamericanas, por ejemplo, eran en un dígito alto o dos dígitos. Con el Banco de Japón cambiando de tendencia al subir la tasa, hubo menos apetito para hacer esa inversión, entonces la demanda de las divisas latinoamericanas empezó a caer, al mismo tiempo del ruido de la caída de las bolsas mundiales”, indicó.

Entre tanto, Camacho, de Credicorp Capital, aseguró que con los últimos indicadores económicos publicados en Estados Unidos, empieza a “resquebrajarse” la perspectiva de que la economía de este país tenga un “aterrizaje suave”, lo que acarrea una “elevadísima carga emotiva”, al tratarse de mayores probabilidades de un escenario de recesión. “El mundo ya venía preocupado por la dinámica de la economía global, reflejado en el precio de activos clave como el petróleo y el precio del cobre, que llevan más de cuatro semanas con correcciones importantes a la baja”.

A esto sumó que la actividad de la economía global se está afectando por tasas de interés altas, los retos estructurales de la economía china y los problemas usuales en la economía europea.

¿Qué pasará con los mercados y el dólar en América Latina esta semana?

Con una caída general en las principales bolsas latinoamericanas en su apertura el lunes 5 de agosto, y con las divisas locales depreciándose frente al dólar, Juan David Ballén, director de análisis y estrategia de la comisionista Casa de Bolsa, aseguró que estas tendencias pueden llevar a los bancos centrales a ser más cautos.

“En estos momentos los inversionistas están liquidando inversiones de alto riesgo y buscando inversiones más seguras, como el dólar estadounidense, el oro y los bonos del Tesoro americano. De esta forma, el primer impacto que sentiremos será una caída en las acciones y un alza en el dólar, lo cual hará que el Banco de la República continúe siendo cauto en reducir las tasas de interés”, explicó a este medio.

Este fortalecimiento del dólar se debe a un contexto de “aversión al riesgo”, dijo Diego Camacho, economista senior de Research en Credicorp Capital, al explicar que al igual que en otros mercados de renta variable, se podrán observar presiones de venta, “no sólo por el contexto que estamos viendo de los principales referentes, sino que está acompañado de que las materias primas, que son como el eje central de las bolsas regionales, están viendo nuevos retrocesos, una afectación importante”.

Desde su visión, en las próximas jornadas los inversionistas deberán decantar “mucho más” la idea de recesión en Estados Unidos, teniendo presente que no todos los indicadores están por debajo de lo esperado, pues hay otros, como el del sector manufacturero que siguen mostrando expansión. “Estas ideas de recesión bien pueden tener un segundo o tercer pensamiento, e ir decantando. Seguramente vamos a tener mucha volatilidad (…) pero la velocidad con la que se han deteriorado los mercados sigue teniendo como espacio correcciones parciales a la espera de que el mercado decante más esta información”, apuntó.

Por último, Walter Molano, economista jefe de BCP Securities, precisó que el reporte de empleo de julio y la reacción del mercado, pueden llevar a la Reserva Federal (FED) a hacer varios recortes de su tasa de interés “antes de fin de año”, lo cual es favorable no solo para la renta fija sino para los bonos de mercados emergentes, como los latinoamericanos.

“Cuando se recorta la tasa se reduce el costo de fondeo, favorable para la bolsa y los bonos latinoamericanos. En el mediano plazo va a ser más positivo porque el recorte de costo de capital, dado que la FED recortará la tasa este año, va a ser positivo para las bolsas y las empresas” de la región, finalizó.

Información de: Bloomberg