En medio de los desafíos que implica un inesperado apagón en el país, el Hospital Central Antonio María Pineda ha demostrado su resiliencia al mantener sus operaciones con normalidad, gracias a su confiable planta eléctrica logrando asegurar el suministro eléctrico eficiente en áreas críticas, garantizando así la continuidad de la atención médica a sus pacientes.
A pesar de que algunos pasillos del hospital puedan estar temporalmente sin servicio eléctrico, el equipo médico y administrativo ha trabajado arduamente para garantizar que las consultas y tratamientos se lleven a cabo con normalidad.
La capacidad de adaptación y la respuesta inmediata del personal han sido clave para superar los obstáculos causados por el apagón, demostrando su compromiso con el bienestar de la comunidad.
Ante situaciones de emergencia, la labor incansable y dedicada del personal del hospital demuestra su compromiso con la comunidad y su capacidad para superar desafíos inesperados.
Carla Martínez / Noticias Barquisimeto