El Papa Francisco está convencido de que “no está madura la cosa para un Concilio Vaticano III. Y tampoco es necesario en este momento, puesto que no se ha puesto todavía en marcha el Vaticano II”. Así lo expresó en la revista «Vida Nueva», en una edición especial con motivo de los 65 años del semanario católico.
El Santo Padre reflexionó con el equipo de la revista en un coloquio en el que repasa los principales temas de la agenda internacional y de la Iglesia, además de analizar esta década de pontificado. “Soy una víctima del Espíritu Santo”, confiesa Bergoglio sobre cómo fue su elección como Sucesor de Pedro, develando algunos detalles sobre cómo vivió aquel momento. Sobre su ímpetu reformador, explica que “tienes que medir hasta dónde puedes pasar el límite y hasta dónde no puedes. Y ahí hay cierta impotencia, pero creo que eso es bueno, porque te evita creerte un dios o alguien todopoderoso”.