El juicio en Tailandia contra Daniel Sancho, el hijo del actor español Rodolfo Sancho, llego a su fin este jueves 02 de Mayo, siendo acusado del asesinato premeditado del cirujano colombiano, Edwin Arrieta, la decisión está prevista para el 29 de agosto.
Después de casi un mes de juicio, que comenzó el 9 de abril, Sancho fue el último en hablar, durante su alegato final, ha criticado a la Policía tailandesa y se ha declarado no culpable del asesinato, según 20 Minutos de fuentes presentes en el tribunal.
El chef español ha mantenido su postura en la autodefensa durante casi 45 minutos. Sancho afirma que Arrieta trató de agredirlo y él se defendió, y que la muerte fue el resultado de una discusión no planificada.
El acusado solo se declarado culpable del descuartizamiento posterior, que es un delito menor de profanación de cadáver en Tailandia.
Carmen Balfagón, la abogada de Sancho, ha informado para medios locales, que el acusado ha pedido perdón y ha prometido compensar económicamente a la familia de Arrieta por el daño moral causado por la profanación del cuerpo.
El juicio terminó un día antes de lo previsto porque los testimonios de un testigo protegido que habrían sido acosados por Arrieta, un psicólogo especialista en abusos sexuales, el padre del acusado y dos abogados de la defensa, se negaron por no proporcionar información relevante al caso.
Leer también: Daniel Sancho admite que descuartizó al Dr. Edwin Arrieta pero niega un plan para matarlo
Sancho afirmó que perdió su «control mental», que su caída fue accidental y que su descuartizamiento se debió al miedo que sintió al ser consiente de la muerte del colombiano.
Es incierto si la tesis de la defensa gana, lo que resultaría en una sentencia de hasta ocho años de prisión y la posibilidad de ser extraditado a España después de dos años o la noción de la acusación, que lo acusaría de asesinato planificado y podría resultar en la pena de muerte.
En 2022, Sancho y Arrieta se conocieron a través de una red social. El 2 de agosto del año pasado, el mismo día en que el cirujano fue asesinado y descuartizado, se encontró en Tailandia. Sus restos fueron dispersados por Sancho en varios lugares, algunos de los cuales fueron arrojados al mar, donde los habitantes del área los encontraron.
Tres días después el español confesó el crimen e ingresó en prisión provisional, donde ha permanecido hasta ahora.
Carla Martínez / Con información de NotiFalcón
