El mayor general Hossein Salami, jefe de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI), declaró este sábado que Teherán no tiene intención de iniciar un conflicto bélico, pero enfatizó que el país se mantiene en un estado de «preparación total» para responder con contundencia a cualquier agresión por parte de sus adversarios.
«Estamos preparados tanto para la guerra psicológica como para la acción militar de los enemigos, pero no retrocederemos ni un solo paso si eso ocurre», afirmó el alto mando militar durante una reunión con mandos y oficiales, según informó la agencia de noticias IRNA. «No estamos preocupados en absoluto. No iniciaremos una guerra, pero estamos preparados para ella», reiteró Salami.
En sus declaraciones, el jefe del CGRI dedicó una parte significativa a referirse a Israel, advirtiendo que el territorio israelí se encuentra dentro del alcance de las capacidades militares iraníes. «Hemos aprendido a vencer a este enemigo (israelí) y hemos desarrollado armas y equipos en consecuencia. Poseemos tanto el ‘software’ como el ‘hardware’ necesarios para derrotar al régimen, a pesar del apoyo absoluto que recibe de EEUU», aseveró.
Salami también hizo referencia a la «Operación Promesa Verdadera», lanzada por Irán en octubre de 2024 en respuesta a ataques israelíes. «A pesar del amplio volumen de defensas aéreas (de Israel), 581 de nuestros misiles alcanzaron sus objetivos», reveló, sin ofrecer detalles adicionales sobre la naturaleza de dichos objetivos.
Finalmente, el mayor general Salami lanzó una advertencia sobre el potencial del llamado «frente de resistencia», una red de aliados regionales de Irán. «El frente de resistencia aún no ha desarrollado todo su potencial. Si se abre, el alcance y el fuego de la guerra superarán la imaginación del enemigo», concluyó.
Las declaraciones de Salami se producen en un contexto de tensiones persistentes en la región de Oriente Medio, donde Irán e Israel mantienen una larga rivalidad. Si bien Teherán insiste en su postura defensiva, sus advertencias sobre la capacidad de respuesta y el potencial de sus aliados regionales podrían interpretarse como una señal de determinación ante cualquier posible escalada.
Carla Martínez / Con información de RT
