El año 2024 fue un año retador bastante complejo, sobre todo a nivel de tipo de cambio. “De alguna manera cuando hablamos de crecimiento económico tenemos que recordar que lo entendemos como una variación positiva del Producto Interno Bruto (PIB), siendo éste la colección de resultados en consumo, inversión, gastos, importaciones y exportaciones; conectando el mercado interno y externo en este indicador que se utiliza como una medida de la eficiencia de las políticas económicas”.
Quien así lo afirmó fue el economista, especialista en finanzas de empresas, y profesor universitario, Aaron Olmos, quien agregó que, aunque el Banco Central de Venezuela, (BCV) aún no ha emitido los datos del último trimestre, lo cierto es que la visión de crecimiento económico para Venezuela que se esperaba está alrededor de 4% o 5% cuando mucho, en todo caso hay que esperar los datos del BCV, referidos al último trimestre, dijo.
Pero evidentemente hubo un crecimiento, no tan elevado, pero a las pruebas nos remitimos desde el punto de vista de los resultados empresariales industriales y comerciales, que, si bien hubo cierto nivel de recuperación, quizás no fue tanto como se esperaba.
Buena noticia
Para el economista, siempre es buena noticia el crecimiento económico, pero considera que hay que hacer la tarea, lo cual pasa por políticas económicas coordinadas. “Recordemos que tuvimos un período bastante complejo de caída del PIB, y que Venezuela sale técnicamente de la hiperinflación en el segundo trimestre del 2021, luego para el 2022 tuvimos esa situación de crecimiento importante del PIB, con el famoso “Venezuela se arregló”. Sin embargo, a finales del 2022 y parte del 2023 la caída del PIB sigue siendo uno de los retos importantes, porque desde el punto de vista real aún hay muchas cosas que corregir.
Intervenciones cambiarias
Olmos indicó que “hasta ahora las políticas económicas consistentes durante el año 2024 fueron más que todo en materia cambiaria las intervenciones alcanzaron 5 mil 609 millones de dólares, lo que casi es un 20% más de lo que se colocó en 2023, que fueron unos 4 mil 709 millones de dólares aproximadamente, que es bastante”.
Explicó que, para tener una idea de esta cantidad, todo lo que se colocó en intervención cambiaria en 2024, equivale a un 53% de lo recaudado por el Seniat de enero a diciembre y representa también el 55% de las reservas internacionales al cierre de 2024. Es un monto bastante importante.
El tema con esto es que el anclaje se pierde a finales de septiembre y principios de octubre, pero no es casualidad, fue una decisión del Banco central de Venezuela, ese proceso de mini devaluaciones que se ha generado, lo cual ha causado más distorsión en la asignación de precios que afecta el nivel de ingresos del venezolano.
La brecha cambiaria
El 31 de diciembre no desaparece la distorsión en la brecha cambiaria, sino que se arrastra, comenzamos el año con un dólar con diferencia de 14 bolívares de distancia entre el dólar oficial y el paralelo, que sigue siendo uno de los elementos más complejos de corregir a nivel de la economía nacional en los actuales momentos. “Comenzamos el año y a una semana de 2025 ya hubo una intervención de 50 millones de dólares”, dijo Olmos.
El tema de las sanciones
A juicio del economista las sanciones van a entrar en juego, tal vez una nueva política de sanciones a instituciones y funcionarios, “tenemos a la vuelta de la esquina después del 20 de enero la ascensión de Trump como presidente de Estados Unidos, y ya tuvimos un período con él y sabemos que la política internacional y la diplomacia venezolana van a estar afectadas por este tema, ya la administración de Joe BIden nos lo hizo a finales del año pasado”.
Considera que más allá de las negociaciones y los acuerdos que se están dando, efectivamente hay que esperar para ver como viene esta visión hacia Venezuela.
Esa visión va a ser muy importante para Venezuela, hay que recordar que el presupuesto del 2024 fijó parte su valor sobre sus ingresos petroleros, es decir, que buena parte del ingreso de Venezuela se basa en los ingresos petroleros, entonces la economía venezolana es muy sensible a esta toma de decisión, más allá de que tengamos otros mercados a los cuales llevar nuestro petróleo, pero es una variable muy importante a la que hay prestarle atención durante 2025; “porque pronto la tendremos presente y por supuesto que va a afectar nuestra economía”.
“Empezamos el 2025 con uno de los principales problemas que es la fijación arbitraria de precios en función de la moneda que el fijador de precios asume que es la mejor para él y una debilidad del salario que sigue siendo un elemento punto de honor a corregir durante todo el año 2025. De mano de una política económica coordinada, donde el desarrollo de la actividad industrial y la recuperación de la actividad económica se base no tanto en intervenciones, ni en transferencias directas, sino en la recuperación del aparato productivo”, finalizó Olmos.
Fijación de precios
Hay un tema importante que es la fijación de precios, aunque la moneda de uso oficial es el bolívar, pero también se sabe que desde el punto de vista de poder de reserva y de valor, todos escogen la moneda con la cual se sienten más seguros y hay el libre albedrio para escoger la moneda que más los represente según sus necesidades, desde el punto de vista del trabajo y para el respaldo de las inversiones de las empresas.
Por esta razón, según lo indica el economista, Aaron Olmos “tenemos apetencia por las divisas, y digo divisa y no dólares, porque de la misma manera que se buscan dólares, se buscan euros y pesos colombianos, ya que a lo largo y ancho del país todavía se sigue viendo esa distorsión en la fijación de precios en diferentes monedas”.
Esta brecha sigue estando presente, y es uno de los principales problemas que hay que atacar durante 2025, también hay que corregir el hecho de que los fijadores de precios utilicen distintas divisas. Tendrán que utilizar la misma divisa, el tema con esto es que muchos empresarios dicen que, si les fijan multas en euros, ellos fijan precios en euros también.
“A fin de cuentas, esto sigue siendo un problema porque el ingreso del venezolano sigue estando en bolívares y la carrera contra el tipo de cambio se pierde en esa distorsión”, aseguró.
Con información de EU