Venezuela aprobó la venta de deuda en el mercado local por primera vez desde 2019

Venezuela aprobó la venta de deuda pública en el mercado local por primera vez en cinco años, en medio de un esfuerzo por cubrir el creciente gasto y estabilizar el tipo de cambio.

El Presidente Nicolás Maduro autorizó la emisión de hasta 20.000 millones de bolívares (unos US$437 millones al tipo de cambio oficial) de pagarés y una cantidad indeterminada de bonos, según un decreto publicado en la gaceta oficial del país con fecha del 13 de noviembre y hecho público esta semana. Los instrumentos podrían estar denominados en moneda nacional o extranjera.

Parte de la emisión será colocada por las casas de bolsa locales a través de la Bolsa de Valores de Caracas, dijo el presidente de la bolsa, Horacio Velutini, añadiendo que la venta es una buena noticia para el mercado. El resto podría emitirse a través de ventas directas, subastas u otros mecanismos que determine el ministerio de Finanzas, según el decreto.

Aunque las autoridades no revelaron el uso de los fondos, se produce en un momento en que el gasto público está en alza ante los pagos adicionales ligados a la temporada navideña. Se espera que los gastos aumenten a US$1.200 millones en diciembre para un total de US$17.500 millones este año, un incremento anual del 58%, según un informe de la firma de análisis financiero con sede en Caracas, Síntesis Financiera.

La administración del Presidente Maduro también parece estar utilizando la venta para absorber bolívares del mercado, ayudando a reducir las presiones sobre un tipo de cambio en aumento, dijo Wilhem López, director general de la correduría local Kairos Valores.

“Es una decisión de restringir la liquidez para que no presione el mercado cambiario”, dijo. “También podría servir para pagar los compromisos de fin de año”.

La brecha entre el tipo de cambio oficial y el del mercado negro se ha ido ampliando desde las elecciones presidenciales de julio, que Maduro dijo haber ganado a pesar de las pruebas en contrario de la oposición.

A raíz de ello, los venezolanos se han deshecho de los bolívares en favor de la seguridad de los dólares, lo que ha aumentado la brecha entre el tipo oficial y el paralelo. En respuesta, el gobierno dejó caer la tasa oficial, una decisión que contribuye a la inflación.

Según estimaciones privadas, la tasa de inflación mensual se duplicó entre septiembre y octubre. El banco central no ha publicado los datos del IPC del mes pasado.

El gobierno está en mora con los bonos extranjeros desde 2017 y debe más de US$150.000 millones a prestamistas extranjeros, según los recuentos de los economistas.

Información de: Bloomberg